domingo, 25 de mayo de 2014

INSTITUCIONES, CAMBIO INSTITUCIONAL Y DESEMPEÑO ECONÓMICO de DOUGLAS C. NORTH. Marisol Hernández

INSTITUCIONES, CAMBIO INSTITUCIONAL Y DESEMPEÑO ECONÓMICO de DOUGLAS C. NORTH. 

Se inicia el análisis de este artículo, en el contexto de la Teoría Política, con algunos datos sobre el autor del libro, DOUGLAS C. NORTH, (1920 -... ), profesor en la Washington University de St. Louis,
Economista estadounidense pionero del enfoque de nuevo institucionalismo económico, alternativa metodológica a los viejos marginalismos, keynesianismos, a la economía de los equilibrios estáticos y de la formalización de modelos abstractos. Es Premio Nobel por considerársele un renovador de la investigación económica por su iniciativa de aplicar la teoría económica y los métodos de análisis cuantitativo a la explicación del cambio económico e institucional en el transcurso del tiempo.

En la Conferencia sobre el “Desempeño económico en el transcurso de los años” impartida por Douglas North en la ceremonia de entrega del Premio Nobel de Economía en Estocolmo (Suecia) el 9 de diciembre de 1993, plantea como alternativa a la teoría económica neoclásica, una variante teórica que toma como fundamento básico del desempeño y desarrollo de una economía, la evolución de sus instituciones en el ámbito temporal, como sustento de una toma de decisiones que, generalmente, los individuos, -cada uno de nosotros- realiza día a día, bajo una tremenda incertidumbre de mercado, con modelos teóricos erróneos y en una dinámica repleta de costos de transacción, los mismos que le restan eficiencia al sistema en su conjunto.

North considera instituciones tanto de iniciativa privada como de gobierno, ya que ambas influyen en el comportamiento de las personas que se ven en la necesidad de tomar decisiones dentro de la economía de mercado. Analiza la naturaleza de las instituciones y su incidencia en el desarrollo económico. A tal efecto caracteriza la naturaleza del cambio institucional y propone un método aproximado de análisis del comportamiento humano, así como una alternativa de análisis de la historia económica basada en estos nuevos lineamientos concluyendo con los resultados sobre la visión de la historia económica y las políticas de desarrollo económico de finales del siglo XX.

También aportó un enfoque, dentro del marco de lo que se ha denominado “nuevo institucionalismo”.
 En la década de 1990, un conjunto de conceptos y métodos de análisis económico que se habían estado elaborando durante cuarenta años, encajaron como piezas de un puzzle para constituir el "Nuevo Institucionalismo Económico". Entre los más destacados teóricos del neo-institucionalismo se podría citar a los Premios Nobel Douglas C. North, Gary S. Becker, Ronald H. Coase y James M. Buchanan.

La aplicación de los conceptos institucionalistas al análisis del desarrollo económico ha puesto en evidencia las limitaciones de las políticas económicas que se estaban recomendando por parte de los organismos internacionales y aplicando por los gobiernos locales. El neoinstitucionalismo analiza cómo las organizaciones sociales y los cambios históricos van construyendo una senda de desarrollo económico que depende en gran medida del pasado. Las políticas económicas para los países en desarrollo no pueden limitarse a la aplicación mecánica de recetas iguales para todos sino que deben tener en cuenta la historia y las instituciones reales que funcionan en cada país. El Banco Mundial ha llegado a entonar un "mea culpa" con su Informe sobre el Desarrollo Mundial 2002 "Instituciones para los mercados".

Antes de iniciar con el análisis de la obra de North, en sí, se enfatiza que al analizar el rol del Estado, desde el punto de vista del institucionalismo, el objetivo es determinar la eficiencia de las reglas de juego que ha creado.  Se considera que las reglas creadas por el Estado deben buscar la eficiencia productiva, o eficiencia asignativa, que mide la cantidad de producto que se obtiene según la asignación de recursos que se haya hecho. Con este criterio, el Estado debe crear instituciones que fomenten, impulsen y expandan la producción de la forma más eficaz.
Joseph E. Stiglitz propone valorar las instituciones por lo que llama la eficiencia distributiva, que mide no solo los resultados que se obtienen, sino también la eficiencia con la que estos resultados se distribuyen en la comunidad. Esta perspectiva social está relacionada con la economía del bienestar, con el concepto de coste de oportunidad y con los criterios  de Pareto. En su formulación más tradicional la eficiencia distributiva se alcanza cuando los recursos se distribuyen de tal forma que maximizan el bienestar de la sociedad.
Douglas North responde a Stiglitz con el concepto de eficiencia adaptativa. Lo que se debe considerar es el modo en que la economía evoluciona a lo largo del tiempo, la inclinación de una sociedad a adquirir conocimientos y a aprender, a inducir la innovación, a correr riesgos y a mantener una actividad creadora, así como a resolver problemas. La eficiencia adaptativa depende del marco institucional que incentive o no este tipo de actitud o predisposición al aprendizaje en un mundo de fuerte dinamismo. En un mundo caracterizado por la incertidumbre, nadie conoce la respuesta correcta a los problemas que se confrontan; por tanto, nadie es capaz de “maximizar” las ganancias efectivamente; de ello se deduce que la sociedad que permita la realización del mayor número de ensayos será la que tenga mayores probabilidades de resolver problemas a través del tiempo.
En su crítica a Stiglitz, North afirma que no se puede dar por cierto que el Estado haya creado las reglas del juego que conducen al crecimiento económico; para North estas reglas son una excepción y tampoco existe ninguna garantía de que serán perpetuas; por tanto el rol del Estado más importante y - más difícil de llevar a cabo- es establecer y reforzar un conjunto de reglas del juego que incentiven a la participación económica y creativa por parte de todos los ciudadanos.
RESUMEN DEL LIBRO, INSTITUCIONES, CAMBIO INSTITUCIONAL Y DESEMPEÑO ECONÓMICO DE DOUGLAS C. NORTH
La obra consta de catorce  (14) capítulos, estructurados de la siguiente manera:
I.- Introducción a las instituciones
II.- Cooperación: el problema teórico
III.- Supuestos conductuales en una teoría de las instituciones
IV.- Una teoría del costo de negociación del intercambio
V.- Limitaciones informales
VI.- Limitaciones formales
VII.- Ejecución obligatoria
VIII.- Instituciones y costos de negociación y transformación
IX.- Organizaciones, aprendizaje y cambio institucional
X.- Estabilidad y cambio institucional
XI.- La vía del cambio institucional
XII.- Instituciones, teoría económica y desempeño económico
XIII.- Estabilidad y cambio en la historia económica
XIV.- Incorporación del análisis institucional en la historia económica: expectativas y acertijos

De este libro, se resalta los siguientes contenidos.

Capítulo I.- Introducción a las instituciones
- Las instituciones son las reglas del juego en una sociedad o, más formalmente, son las limitaciones ideadas por el hombre que dan forma a la interacción humana. El cambio institucional conforma el modo en que las sociedades evolucionan a lo largo del tiempo, por lo cual es la clave para entender el cambio histórico.
Ni la economía ni la historia parecen apreciar la función de las instituciones en el desempeño económico porque todavía no ha habido un marco analítico que integre el análisis institucional en la economía política y en la historia económica. El objetivo de la obra de Douglas C. North es proporcionar este marco básico.
El autor se va a interesar por dos tipos de instituciones: las formales (son creadas; por ejemplo las constituciones políticas de los Estados) y las informales (que evolucionan a lo largo del tiempo; por ejemplo el derecho consuetudinario).
Se refiere North a los “organismos” diciendo de ellos que incluyen cuerpos políticos (partidos políticos, el Senado…), cuerpos económicos (empresas, sindicatos, cooperativas…), cuerpos sociales (iglesias, clubes…), y órganos educativos (escuelas, universidades…). Son grupos de individuos enlazados por alguna identidad común hacia ciertos objetivos.
La interacción entre instituciones y organismos hará evolucionar a una sociedad.
Afirma North que la función principal de las instituciones en la sociedad es reducir la incertidumbre estableciendo una estructura estable (pero no necesariamente eficiente) de la interacción humana.

Capítulo II.- Cooperación: el problema teórico
Critica el autor que la teoría económica denominada neoclásica, basada en el supuesto fundamental de la escasez y, por consiguiente, de la competencia (y cuyas consecuencias armoniosas provienen de los supuestos de u proceso de intercambio), ha adolecido de comprensión sobre lo que es la coordinación y la cooperación humanas. Afirma North que negociar resulta costoso.
Las condiciones en que puede sostenerse la cooperación han producido una literatura inmensa, tanto en la teoría del juego como en los teóricos del no juego que están interesados en el proceso del modelamiento político.
Russell Hardin defiende que las estrategias condicionales entrañan vigilancia y coacción (mediante amenazas).
Howard Margolis presenta un modelo en el cual la conducta individual está determinada en parte por motivos altruistas. Margolis afirma que los individuos tienen dos tipos de funciones de utilidad, aquellas que favorecen preferencias orientadas hacia el grupo y las que favorecen preferencias egoístas, y que los individuos realizan intercambios entre ambas. Su modelo le permite explicar ciertas pautas de conducta de votación que al parecer caraecen de sentido en el contexto conductual de un individuo que maximiza la riqueza.
En qué condiciones puede existir la cooperación voluntaria sin la solución hobbesiana de la imposición de un Estado coercitivo para crear producciones cooperativas. Históricamente el crecimiento de las economías ha ocurrido en el seno del marco institucional de políticas coercitivas bien desarrolladas. No observamos anarquía política en países de altos ingresos. Por otra parte, la facultad coercitiva del Estado ha sido empleada a lo largo de gran parte de la historia en formas que han sido enemigas o contrarias al crecimiento económico. En verdad, resulta difícil sostener intercambio complejo si no se cuenta con un tercer elemento que haga cumplir por la fuerza los acuerdos.

Capítulo III.- Supuestos conductuales en una teoría de las instituciones
Únicamente cuando se entienden ciertas modificaciones en la conducta de los actores se puede encontrar sensatez en la existencia y estructura de las instituciones y explicar la dirección del cambio institucional.
Para explorar las deficiencias del enfoque de la elección racional en su relación con las instituciones, se debe sondear dos aspectos particulares de la conducta humana: 1) la motivación y 2) el desciframiento del medio.
La conducta humana es más compleja que la que está encarnada en la función utilitaria individual de los modelos de los economistas. Muchos casos no simplemente maximizan la conducta de la riqueza, sino también del altruismo y de las limitaciones autoimpuestas, lo cual cambia radicalmente los resultados con respecto a las elecciones que de hecho hace la gente.
La motivación de los actores que ayuda a dar forma a las instituciones y que provee los medios a través de los cuales el altruismo y otros valores que no maximizan la riqueza entran en la elección.
Las instituciones existen y reducen las incertidumbres propias de la interacción humana. Estas incertidumbres surgen como consecuencia de la complejidad de los problemas que deben resolverse y de los programas de solución de problemas poseídos por el individuo.
Debe determinarse hasta qué punto las motivaciones maximizadoras de la no riqueza influyen en las elecciones.

Capítulo IV.- Una teoría del costo de negociación del intercambio
Una vez que se reconoce que los costos de producción son la suma de los costos de transformación y negociación,  se necesita un nuevo marco analítico de la teoría macroeconómica.
Aunque a veces interesa a las dos partes ocultar ciertos tipos de información, en otras favorece a sus intereses revelarlos. En este contexto, se puede presentar algunas generalizaciones sobre los aspectos de medición de un modelo de cambio de costo de negociación.

Capítulo V.- Limitaciones informales
En todas las sociedades, desde la más primitiva hasta la más avanzada, la gente se impone limitaciones para dar una estructura a sus relaciones con los demás.
En el moderno mundo occidental se considera que la vida y la economía están ordenadas por medio de leyes formales y de derechos de propiedad. Sin embargo, aun en las economías más desarrolladas, las normas formales constituyen una parte pequeña aunque muy importante del conjunto de limitaciones que dan forma a las elecciones; una reflexión rápida sugeriría la abundancia de limitaciones informales.
Se podrrá definir la cultura como “transmisión de una generación a la siguiente, por la enseñanza y la imitación, de conocimientos, valores y otros factores que influyen en la conducta” (Boyd y Richerson, 1985).
Las limitaciones informales son también características comunes de las economías modernas.
Robert Axelrod (1986) establece un ejemplo vívido de una norma de conducta sancionada socialmente. La víspera por la noche del día en que iba a sostener un duelo con Aaron Burr, Alexander Hamilton se sentó a escribir todas las razones de por qué no debía aceptar ese reto; una fundamental, por supuesto, era que corría el riesgo de morir. Sin embargo, pese a las abrumadoras bases racionales para no ir al duelo, consideró que su influencia y eficacia en el terreno público se verían severamente disminuidas por tal decisión porque el duelo era el modo socialmente aceptado de arreglar disputas entre caballeros. Las normas sociales dictaban la elección, no las reglas formales.
Los códigos obligatorios de conducta tienen valor únicamente en términos de limitaciones informales, pues alteran la elección cuando el individuo renuncia a la riqueza o al ingreso a cambio de otro valor,
El argumento de Margolis dice que los individuos poseen no una sino dos funciones de utilidad: Las preferencias S están gobernadas por la función usual de preferencia del autointerés, en tanto que las preferencias G son puramente sociales (interesadas en el grupo).
La forma en que la mente procesa información no sólo es la base de la existencia de instituciones sino una clave para entender cómo las limitaciones informales tienen un papel importante en la formación de la elección tanto a corto plazo como en la evolución a largo plazo de la sociedad.
¿Qué es lo que hace que las normas evolucionen o desaparezcan, por ejemplo, el duelo como una solución de diferencias entre caballeros?
Las ideas, las ideologías organizadas, e inclusive el fanatismo religioso desempeñan papeles importantes en cuanto a dar forma a sociedades y economías.
Es importante el hecho de que las limitaciones informales derivadas culturalmente no cambiarán de inmediato como reacción a cambios de las reglas formales. Como resultado, la tensión entre reglas formales alteradas y limitaciones informales persistentes produce resultados que tienen consecuencias importantes en la forma en que cambian las economías.

Capítulo VI.- Limitaciones formales
La creación de sistemas legales para manejar disputas más complejas exige reglas formales.
Se considera un modelo simplificado de una política (situación) compuesta de un gobernante y gobernados. En un entorno así de simple, el gobernante actúa como monopolista discriminador, que ofrece protección y justicia a diferentes grupos de electores o cuando menos la reducción del desorden interno y la protección de derechos de propiedad a cambio de impuestos. Debido a que diversos grupos de electores tienen diferentes costos de oportunidad y de poder de negociación frente al gobernante, se producen distintas negociaciones. Pero también hay economías de escala en la previsión de estos bienes (semipúblicos) de derecho y de cumplimiento. Por consiguiente, se aumenta el ingreso total, pero la división de las ganancias incrementales entre gobernante y gobernados depende de su poder relativo de negociación; cambios en el margen, sea en el potencial de violencia del gobernante o en los costos de oportunidad del gobernado, darán por resultado nuevas divisiones del ingreso incremental. Es decir, el ingreso bruto y neto del gobernante difiere significativamente como resultado de la necesidad de crear agentes (una burocracia) para monitorear, medir y cobrar el impuesto. Todas las consecuencias inherentes a la teoría de la agencia se dan aquí.
Este modelo de la política se vuelve un paso más complicado cuando se introduce el concepto de un organismo representativo que refleja los intereses de los grupos constituyentes y su papel en la negociación con el gobernante (parlamentos).
La evolución de la política a partir de gobernantes individuales absolutos a gobiernos democráticos es concebida típicamente como un paso hacia una mayor eficiencia política. En el sentido de que el gobierno democrático da un porcentaje cada vez mayor al acceso del pueblo al proceso de toma de decisiones políticas, elimina la capacidad caprichosa de un gobernante para confiscar riquezas, y desarrolla un cumplimiento obligatorio por un tercero de contratos con un poder judicial independiente de lo cual resulta sin duda un avance hacia una mayor eficiencia política.
Considerando únicamente las reglas formales, se tiene una noción inadecuada y a menudo equívoca de la relación entre limitaciones formales y desempeño.

Capítulo VII.- Ejecución obligatoria
En condiciones muy simplificadas, es decir, cuando las partes adquieren información perfecta y el juego dura indefinidamente y es jugado por las mismas partes, es posible alcanzar soluciones de cooperación autocumplibles.
Mientras más complejo sea el intercambio en tiempo y en espacio, más complejas y costosas serán las instituciones necesarias para lograr resultados de cooperación.

Capítulo VIII.- Instituciones y costos de negociación y transformación
Se necesitan recursos para definir y proteger derechos de propiedad y para hacer cumplir los convenios. Las instituciones, junto con la tecnología empleada, determinan esos costos de negociación.
La relación entre derechos y limitaciones en un intercambio se puede ejemplificar en tres niveles: primero, en el nivel de un intercambio único y recto; segundo, en la relación más compleja y necesaria en el proceso de producción y, finalmente, en la economía vista como un todo.
En este capítulo se resalta que el marco institucional desempeña una función importante en el rendimiento de una economía.
El mercado en su conjunto es un conjunto de instituciones; algunas aumentan la eficiencia y otras la reducen.
En cualquier caso, queda claro que este marco institucional es la clave del éxito relativo de las economías.

Capítulo IX.- Organizaciones, aprendizaje y cambio institucional
Entendemos a las organizaciones como entidades ideadas por sus creadores con el propósito de maximizar la riqueza, el ingreso, u otros objetivos definidos por las oportunidades que brinda la estructura institucional de la sociedad.
El conocimiento comunicable es, como lo indica el nombre, conocimiento que se puede transmitir de una persona a otra. El conocimiento tácito se adquiere, en parte, mediante la práctica y sólo parcialmente es comunicable. Diferentes personas tienen aptitudes innatas distintas para adquirir conocimientos tácitos. No se puede aprender a jugar bien al tenis únicamente leyendo un libro, y aun con la práctica hay diferencias enormes entre jugadores. Lo que es aplicable a cualquier deporte también puede aplicarse a un gran número de aptitudes, entre las cuales la aptitud empresarial es probablemente la más importante.
El marco institucional dará forma a la dirección de la adquisición del conocimiento y de las aptitudes y la dirección será el factor decisivo del desarrollo a largo plazo de esa sociedad.
Se cuenta con instituciones que premian limitaciones en la producción, en el trabajo y en los delitos y también se tiene instituciones que premian la actividad económica productiva.
Una estructura eficaz de normas no sólo es el premio del éxito sino que también impide la sobrevivencia de las partes mal adaptadas de la estructura organizacional, lo cual significa que normas eficaces disolverán esfuerzos frustrados y que promoverán acciones exitosas.

Capítulo X.- Estabilidad y cambio institucional
Un punto esencial en este estudio es que las instituciones, al reducir el precio que se paga por nuestras convicciones hacen que nuestras ideas, dogmas, modas e ideologías sean puntos importantes del cambio institucional.
Guerras, revoluciones, conquistas y desastres naturales son fuentes de un cambio institucional discontinuo.
Con la expresión cambio discontinuo el autor se refiere a un cambio radical en las reglas formales, comúnmente como resultado de una conquista o revolución.

Capítulo XI.- La vía del cambio institucional
¿Qué determina las pautas divergentes de evolución de sociedades, grupos políticos o economías a lo largo del tiempo? ¿Cómo se explica la sobrevivencia de economías con desempeño persistentemente bajo durante largos lapsos de tiempo?
La evolución del derecho consuetudinario, una forma de cambio institucional, ayuda a entender el cambio institucional general. El derecho consuetudinario está basado en precedentes, por ello proporciona continuidad y predecibilidad esencial que son elementos fundamentales para reducir la incertidumbre entre las partes contratantes. Decisiones anteriores se incrustan en la estructura del derecho, que cambia marginalmente conforme se presentan nuevos casos, o al menos en términos de casos pasados, sin precedentes; ya decididos éstos, se vuelven a su vez una parte del marco legal. Las decisiones judiciales reflejan el proceso subjetivo de información en el contexto de la construcción histórica del marco legal. Ahora bien, si de hecho el derecho consuetudinario es eficiente según ha afirmado un buen número de especialistas en derecho y economía, ello se debe a que el proceso competitivo encabeza la vía de los actores judiciales hacia modelos correctos. Pero si quienes toman decisiones judiciales operan con base en información incompleta y en sus opiniones subjetivas e ideológicamente condicionadas de cómo debe ser el mundo, entonces no es posible hacer ninguna afirmación. Independientemente de cómo entienda el proceso judicial, el marco institucional continúa y se modifica incrementalmente debido a las actividades deliberadas de los organismos que presentan casos ante los tribunales.
La vía de la dependencia significa que la historia importa. No se puede entender las elecciones de nuestros días sin trazar la evolución incremental de las instituciones.
¿Qué ocurre cuando un conjunto común de normas es impuesto a dos sociedades diferentes? Un conjunto común de cambios fundamentales de precios relativos o la imposición también común de un conjunto de reglas desembocarán en resultados muy divergentes en sociedades con dispositivos institucionales diferentes.

Capítulo XII.- La vía del cambio institucional
No se puede ver, sentir, tocar y ni siquiera medir las instituciones; son construcciones de la mente humana. El caso es que aun los economistas neoclásicos más convencidos admiten su existencia y ciertamente las vuelven parámetros en sus modelos.
La racionalidad instrumental, postulado de la teoría neoclásica, da por sentado que los actores poseen la información necesaria para evaluar correctamente las alternativas y en consecuencia hacer elecciones que alcanzarán los fines deseados.
Si se pregunta qué es lo que hace imperfectos los mercados, la respuesta es los costos de negociación.
¿Qué hará que el mercado político se aproxime al modelo de costo cero de negociación en el intercambio económico eficiente? Las condiciones de información e institucionales necesarias para realizar este cambio son:
1.- Las partes afectadas deben tener la información y el modelo correctos para saber que el proyecto de ley los afecta y también para conocer el monto de las pérdidas y ganancias.
2.- Los resultados se pueden comunicar a su agente (el legislador), el cual votará exactamente como se acordó.
3.- Los votos se pesarán por el conjunto de ganancias y pérdidas netas de modo tal que el resultado neto pueda evaluarse y para que a los perdedores se les compense apropiadamente.
4.- Este intercambio puede lograrse a bajo costo, de modo que la negociación valga la pena.
La estructura social más favorable para acercarse a tales condiciones es una sociedad democrática moderna con sufragio universal.

Capítulo XIII.- Estabilidad y cambio en la historia económica
Las instituciones proporcionan la estructura básica por medio de la cual la humanidad a lo largo de la historia ha creado orden, y de paso ha procurado reducir la incertidumbre. Junto con la tecnología empleada determinan los costos de transacción y transformación y por consiguiente la utilidad y la viabilidad de participar en la actividad económica. Conectan el pasado con el presente y el futuro, de modo que la historia es principalmente un relato incremental de evolución institucional en el cual el desempeño histórico de las economías sólo puede entenderse como la parte de una historia secuencial. Las instituciones son la clave para entender la interrelación entre la política y la economía y las consecuencias de esa interrelación para el crecimiento económico.
Una explicación tradicional del éxito en Europa, contrastado con China, el Islam y otras áreas, es la competencia entre unidades políticas.

Capítulo XIV.- Incorporación del análisis institucional en la historia económica: expectativas y acertijos
Las instituciones determinan el desempeño de las economías siempre y cuando sean instituciones eficientes.
Se crean instituciones eficientes mediante una política que tiene incentivos internos para establecer y hacer cumplir derechos de propiedad eficientes.

Para concluir, el autor, North presenta en este libro, su teoría sobre la existencia de relación entre los cambios institucionales que se producen en las distintas sociedades y el desarrollo económico de éstas.
Según North, el ser humano crea instituciones como consecuencia de la incertidumbre que rige en las relaciones humanas.
De este modo, habrá sociedades que creen instituciones capaces de estimular el crecimiento económico, mientras que otras sociedades crearán instituciones que den lugar al estancamiento económico.
Por lo antes expuesto, se comprende que, resulta evidente el gran grado de dependencia existente entre la evolución de las instituciones en un determinado país y su nivel de desarrollo económico. Por lo tanto, al analizar el crecimiento más o menos rápido, el estancamiento e incluso la recesión económica de un país, las instituciones del mismo deben ser consideradas como una variable muy importante.
En el contexto de la teoría política, e integrando con el análisis económico, se percibe esta obra como un ejemplo de la importancia que tiene en el campo de la Ciencia Política el análisis de las instituciones como base para el entendimiento de la evolución de las distintas sociedades.
Se comprende que el institucionalismo es una parte más de la teoría política que aporta sus teorías y análisis y que se considera tan importante como la teoría normativa, conductismo, entre otras, ya que cada una de ellas individualmente consideradas no tendría el sentido que poseen considerándolas como una parte de un todo (la evolución de la Política entendida como ciencia con objeto de estudio el poder)

Marisol Hernández. Doctora en Ciencia política

viernes, 9 de mayo de 2014

La convivencia democrática y el orden en Venezuela. Marisol Hernández

La convivencia democrática y el orden en Venezuela. Marisol Hernández

Se pretende dar a conocer, a la opinión pública, una visión de la coyuntura que vive el país y el sentir de significativos sectores de la comunidad.
Igualmente, se reafirma el compromiso con la defensa y promoción de los derechos humanos,  y poner al servicio de la nación y la patria una experiencia en la labor cotidiana de armonizar en la diversidad política, social y cultural del país, expresado el ánimo de aportar al restablecimiento de la convivencia democrática y el orden en Venezuela.
Se manifiesta el respaldo y apoyo al compromiso que se asumen con la defensa y promoción de los derechos humanos, teniendo al respecto una responsabilidad de fomentar una educación de los derechos constitucionales,  específicamente los relacionados con la diversidad política, cultural y social, de la justicia y la paz".   

Como integrante de una comunidad de conocimiento se reflexiona sobre la vida política, económica, social y cultural de las universidades y del país. Es decir, los ciudadanos venezolanos se encuentran conmocionados ante los acontecimientos que se han suscitado en Venezuela durante los últimos tres meses; eventos que se iniciaron como manifestaciones cívicas del  descontento de sectores de la población estudiantil por problemas que afectan a todos los que cohabitan el territorio nacional, tales como la inseguridad, el desabastecimiento, la escasez de divisas, de bienes, de servicios y la inflación, han degenerado en formas violentas de protesta por una parte, y en una inhumana represión por parte de la fuerza pública con el lamentable saldo de muertes, lesionados, detenidos, situaciones de violación de los derechos humanos y vulneración a las garantías y los derechos constitucionales, particularmente los consagrados en los artículos 44, 46, 49, 50, 55, 57, 58, 68 y 109 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, pacto social que debe regular y limitar las actuaciones de todos, el gobierno y la población.

La comunidad universitaria y todos los sectores del ámbito nacional se encuentran de duelo por la muerte de miembros de su comunidad estudiantil y de las fuerzas que resguardan el orden; de duelo por la profundización de heridas sociales, políticas, económicas y actitudes fratricidas. La negativa de algunos sectores radicales a establecer las condiciones que la paz y el diálogo exigen, como son las muestras reales de reconocimiento del adversario político y respeto mutuos, con el fin de garantizar, la gobernabilidad y oportunidades a las generaciones futuras, urgentes para la reconstrucción de la unidad social y la identidad  nacional, es decir, la continuidad del proyecto de país.

Se enfatiza, que la cultura que identifica a un pueblo no se decreta sino que se origina en un proceso complejo y progresivo, tampoco se decreta los comportamientos y conductas, siendo la convivencia pacífica una de las que emerja o no según las acciones que promuevan todos los particulares involucrados, en la esperanza  de crear condiciones para focalizar categorías específicas  del bienestar y bien común, en el contexto de la democracia.


Para concluir, los derechos humanos son derechos culturales, desde la libertad de expresión hasta la vida, y el compromiso es su promoción y respeto, y por ende se exhorta a su garantía. Y por tanto, será posible tener una realidad presente y un futuro sin la violencia. Se necesita mediar por la paz que requiere el país abriendo espacios para la sensibilización y la socialización de las idóneas prácticas culturales comunitarias, desarrollando acciones basadas en el humanismo, promoviendo y decretando valores democráticos como el pluralismo, la tolerancia y la cultura de paz en pro del diálogo, discusión de ideas, la creación, la civilidad, la diversidad de criterios, que estructuran el rasgo distintivo del patriotismo venezolano, el cual debe materializarse en resultados concretos

viernes, 4 de abril de 2014

Lo que no es la democracia según Sartori. Marisol Hernández

Lo que no es la democracia según  Sartori. Marisol Hernández
Síntesis del Capítulo 7: Lo que no es la democracia.
Para llegar a una definición precisa del concepto de democracia, Sartori defiende que es necesario encontrar un “opuesto apropiado”, y aún contradictorio. Procede a una enumeración de las soluciones posibles según él.
1 - Contrarios, contradictorios y grados. Afirma que existe una frontera entre sistemas democráticos y sistemas no democráticos, precisamente porque son sistemas, basados sobre principios que pueden ser democráticos o no. Entonces es necesario tratar la cuestión de los regímenes en un foco de clase (y no de grado).
2 - Autoritarismo, autoridad y poder. Según Sartori la noción de autoridad supone la legitimidad; tanto más una institución tiene legitimidad, menos tiene poder, dado que su poder depende de la confianza dada por el pueblo. La noción de autoritarismo carece de sentido.
3 - El Estado total, la democracia y el absolutismo. El absolutismo significa la concentración del poder en las manos de una sola instancia, que puede ser un órgano democrático; en si no es contradictorio con la democracia. En contrario el Estado total se caracteriza por el absolutismo del poder del Estado contra los ciudadanos, entonces la base del poder democrático desaparece.
4 - El totalitarismo.
La palabra totalitarismo apareció en 1925 y como el autoritarismo, fue inventada por el fascismo. El fascismo en Italia era una dictadura autoritaria.
Sartori diserta sobre el vocablo totalitarismo. Cita, para Edgar Hallet Carr (1949) no es el totalitarismo como régimen político, sino la mente totalitaria (sistema de creencias, ideología, mística, religión o visión del mundo.
Friedrich establece una lista de  cinco requisitos para la existencia de un sistema político totalitario
a) una ideología oficial;
b) un único partido de masas controlado por una oligarquía;
c) el monopolio gubernamental de las armas;
d) el monopolio gubernamental de los medios de comunicación, y
e) un sistema policiaco de terror.
Se añadió un sexto requisito.
f) una economía dirigida de manera centralizada

Semánticamente, Para Sartori el totalitarismo es un hecho político propio de la modernidad, que denota el encarcelamiento de toda la sociedad dentro del Estado, es decir, que pretende encerrar la sociedad dentro del Estado. En palabras de Finer: toda la sociedad está politizada; si sobreviven todavía ámbitos privados de la vida, se debe… a la tolerancia  del gobierno.
 Su característica fundamental según el autor es de instaurar una ideología que adquiere el estatuto de religión.  Durante el fascismo, en Italia se decía todo en el Estado y se aplica mediante el uso de los instrumentos coactivos proporcionados por conocimientos técnicos, y se encuentra frente a la invasión definitiva de la intimidad humana, a  la destrucción de la independencia, de la diversidad y la autonomía en la vida de las colectividades humanas. En suma, una enorme guarnición política donde una sociedad de masa ha sido encapsulada en el Estado. Esto es la destrucción de la línea entre el Estado y la sociedad.
Cuando Montesquieu estableció su clasificación de las formas políticas, cada una de ellas contaba con un principio específico explicativo: la virtud cívica en la democracia; l a moderación en la aristocracia; el honor en la monarquía; y el temor en el despotismo.
Sartori dice: la característica de un gobierno despótico es el gobierno mediante el temor; deduce el totalitarismo supone el mayor temor, es decir, el terror. Si se piensa en Hitler y en Stalin, explica que la clave de la interpretación de Hannah Arendt y de parte de la literatura de los años cincuenta sea el gobierno por el terror. Los regímenes comunistas  (de Stalin, la revolución cultural de Mao con cuatrocientos mil muertos y tres millones de personas encarceladas) demostró que el terror era más una variable que un elemento definidor de los sistemas totalitarios
5 - Dictadura y autocracia.
Examina el conjunto restante de posibles opuestos a la democracia y de las formas de establecer sus límites. Sartori trata brevemente de la tiranía y del despotismo y aborda la                                                                                                dictadura y, por último, la autocracia.
Entre los griegos
La autocracia supone que el poder es la propiedad de uno. Eso es un opuesto apropiado de la democracia dado que esa supone precisamente que el poder legítimo es difundido en el pueblo.
  En el presente trabajo se desarrolla  el concepto de democracia desde la perspectiva de un  autor relevante en el tema, pensador del período de postguerra.  Podría ser adecuado complementar, en esta parte final, aspectos importantes sobre la democracia, basado, entre otros, en el libro "El Crepúsculo de la Política" de Antonio Leal.
En el caso de Joseph Schumpeter el texto de consulta fue "Capitalismo, Socialismo y Democracia", por lo que se hace referencia al capitalismo, como técnica económica y a la democracia, como método político, ambos relacionados al espíritu de la competición de los actores. No obstante, esta aproximación bibliográfica permite una conexión con la esencia misma de la perspectiva schumpeteriana, quien introduce en la esfera del orden político, el instituto del intercambio y el mercado. (Leal, 1996, p.30 ).
Los operadores o los partidos políticos proveen de una oferta política, en competición entre ellos, y los electores eligen a quienes deben decidir. Schumpeter aplica un criterio de eficiencia al método democrático, la cual deriva de la calidad de la conducción (leadership) democrática, tanto en cuanto al proceso de selección de los que gobiernan como a los temas sobre los cuales se debe decidir.

Se percibe aquí una diferencia entre el "homo economicus", que para la ortodoxia libremercadista se supone totalmente "libre y racional" en su elección, y el "homo politicum" de Schumpeter, cuya elección está bajo la influencia de grupos y de actores colectivos que modelan su información e interpretan sus intereses.
Para Schumpeter "la voluntad popular es el producto, no la fuerza propulsiva del proceso político". (Leal, 1996, p.106).
El concepto de poliarquía de Robert Dahl se ajusta, por lo que se comprende, a lo que la democracia es en la práctica, en la realidad, por lo que constituye un "concepto- herramienta" de gran valor al momento de hacer política comparada. Su análisis se refiere fundamentalmente a los regímenes nacionales, es decir, a nivel de país, de estados nacionales, sin embargo, como él mismo lo señala, es perfectamente aplicable a niveles inferiores de organizaciones políticas y sociales: municipios, provincias, sindicatos , empresas y partidos políticos, entre otros. Este aspecto es relevante, ya que varios países, incluida Venezuela, pueden mostrar estándares aceptables de democratización a nivel nacional, sin embargo, no presentan una correspondencia democrática en las organizaciones nacionales o a nivel de sociedad civil.
Paul E. Sigmund señala que las tres fuentes  de ideologías contemporáneas en Latinoamérica: el liberalismo, el catolicismo y el marxismo han tenido todas unas relaciones ambiguas con la democracia, pero que, no obstantes, en los siglos XX y XXI, han evolucionado hacia un apoyo más fuerte de las normas y procedimientos democráticos.
Para estas tres tradiciones, la democracia no fue un principio de valor primordial. Incluso pudo ser percibida como un obstáculo para los valores que cada una de ellas representaba: la libertad económica y política para los liberales; la santificación personal y colectiva para el catolicismo; y la igualdad y justicia social para el marxismo.
Pese a que cada una de estas tradiciones tiene valores centrales que exigen la democracia. Los liberales han aprendido que no se puede ser libre sin tener participación en el propio gobierno. Los cristianos devotos ahora reconocen que tienen el deber de participar políticamente para el mejoramiento de un mundo creado por Dios y poblado por hombres que son hechos a su imagen y semejanza, y la meta última del marxismo supone la libre cooperación de seres humanos autónomos, socialmente responsables, cuyas potencialidades se desarrollan a través de la participación política.(AAVV, 1990, p.58).
Los autores referidos tienen tendencia hacia una concepción neoclásica de la democracia. Una definición institucional de ella que permite puntos de referencia al momento de catalogar a los diferentes sistemas y regímenes. Esta forma de clasificación se comprende relevante en un mundo globalizado donde la democracia se establece como el sistema de gobierno deseable y en muchos casos condición sine qua non para la pertenencia a organizaciones supranacionales. La democracia de inicio de siglo XXI es una democracia sin adjetivos, no tiene apellidos, como dice Huntington.

El sistema político democrático es el único que institucionaliza la oportunidad que tienen los ciudadanos de realizar su libertad. Esta libertad que, está inserta dentro del Estado de Derecho. (Estévez, 1987, p.10).
Es relevante que - en un sistema de gobierno democrático- los derechos ciudadanos deben garantizar a las personas adecuada protección frente a la posibilidad de interposición del poder del Estado con sus libertades. Para nuestros países latinoamericanos, que han pasado un período reciente de conculcación de los derechos de muchos de sus ciudadanos, esto sería de especial significado, puesto que éste atropello se hace en nombre de la seguridad del Estado, concepto que adquiere categoría de valor supremo, antepuesto a la justicia y a la libertad.

En tal sentido, en el caso de Venezuela, hay un camino complejo para establecer un grado de democratización equivalente al período en que rigió la Constitución de 1961. Esto pasa por una reforma a la normativa que permite enclaves autoritarios que entraban la libre expresión democrática de las mayorías, por una parte, y por la otra, más complejo aun, separar conceptual e instrumentalmente la seguridad de la defensa, lo cual se percibe, el núcleo  del conflicto político-militar.
En la democracia de inicio de siglo XXI, los derechos humanos, que constituyen el conjunto de prerrogativas básicas que las personas adquieren por el hecho de existir, no pueden ser no reconocidos  por ningún ordenamiento jurídico sin perder su legitimidad moral. (Ibídem).
Para concluir este artículo se cita, las reglas sobre la democracia  que expresa Umberto Cerroni, puesto que se perciben como una clara expresión de lo que se espera de la democracia: la primera regla es el consenso, todo puede ser hecho si se obtiene el consenso del pueblo, nada sin él.
 La segunda regla, es  la competición. Para construir el consenso, todas las opiniones pueden y deben confrontarse entre ellas.
La tercera regla, es  la mayoría, para calcular el consenso, se cuentan las cabezas, sin cortarlas, y la mayoría es la ley.
La cuarta regla es la minoría. Si no obtienes la mayoría, no estas fuera, puedes prepararte para derrotar a la mayoría en el próximo enfrentamiento. Es también la regla de la alternancia.
La quinta regla es el control, la democracia es controlable.
La sexta regla es la legalidad. Las leyes se fundan en el consenso, el consenso se funda en las leyes.
La séptima regla, es la responsabilidad. Se tienes derecho a reivindicar tu interés particular, pero condicionado a no interferir con el interés general de la comunidad. (Leal, 1996, p.38).
Hacia fines de siglo XX se genera un cambio cualitativo de gran dimensión y que se relaciona con la valoración de la democracia como un fin, como un modo de vida, como un ideal digno de ser buscado, para una mejor convivencia, en paz.

BIBLIOGRAFÍA.
(1) Sartori, Giovanni. Elementos de teoría política. Cap. 4 Democracia. Alianza
Editorial. Madrid. 1987.
(2) Schumpeter, Joseph. Capitalismo, Socialismo y Democracia. Harper. N.Y. 1947.
(3) Huntington, Samuel. El sobrio significado de la democracia. Revista de Estudios
Públicos Nº33. Santiago.1989.
(4) Dahl, Robert A. La Poliarquía. Participación y oposición. Editorial Tecnos. Madrid.
1989.
(5) Leal L., Antonio. El Crepúsculo de la Política. LOM Ediciones. Santiago.1996.
(6) AA.VV. Democracia contemporánea. Transición y consolidación. Ediciones
Universidad Católica. Santiago. 1990.
(7) Estévez, Eduardo E. Seguridad e Inteligencia en el Estado Democrático. Fundación
A. Illia. Buenos Aires. 1987.

Marisol Hernández.  Investigadora en Ciencias Políticas